1 abril 1894
En Sanlúcar de Barrameda la crisis se manifiesta gravísima y continua
los temores de alteración del orden y en Arcos poco menos.
Es triste así mismo la crisis, aunque menos grave, en Jerez,
Algodonales, Rota, Alcalá de los Gazules, Puerto de Santa María, San Fernando y
otros pueblos.
Gran número de obreros están hambrientos. No bajan de diez a doce mil
los verdaderamente necesitados.
En diez días van repartidas cien mil pesetas.
El Gobierno ha resuelto todos los expedientes de obras que había
pendientes, pero esto no basta, porque eran pocas las obras que había
proyectadas, y de esas aun no realizarán las que dependen de la Diputación.
A última hora se ha recibido la noticia de haber ocurrido en Sanlúcar
de Barrameda el hecho triste de caer en medio de la calle casi exánimes algunas
personas, por falta de alimentos.
Durante todo el día han recorrido las calles de Sanlúcar de Barrameda
numerosos grupos de jornaleros, mujeres y niños hambrientos. A pesar de esto,
hasta las seis de la tarde continuaba la tranquilidad en aquella población.
Esta mañana han ido al Ayuntamiento de Sanlúcar de Barrameda unos dos
mil jornaleros, gritando pan y trabajo.
El alcalde les pidió que se disolvieran, pero no se fueron. Les rogó
que volvieran mañana y tampoco se marcharon. Entonces los guardias civiles y
municipales disolvieronlos. Al retirarse los manifestantes gritaban: “Queremos
comer”.
Cuentase de Sanlúcar de Barrameda cosas estupendas. Dícese que a
pobres que sólo cuentan con unos pocos céntimos para comer se les vende el pan falto de pese. Háblase también
de irregularidades cometidas en aquella población.
A consecuencia de estos rumores, el Gobernador enviará un delegado que
gire una visita para depurar responsabilidades.
3 abril 1894
Personas llegadas de Sanlúcar de Barrameda confirman la noticia que
telegrafié de ayer varios obreros quitaron algunas cargas de pan y se las
repartieron.
Créese que la crisis durará allí hasta mediados de mes, época en que
suele comenzar la labor de las viñas.
Casi todos los alcaldes de los pueblos telegrafían que reina
tranquilidad.
En Sanlúcar de Barrameda reuniéronse los contribuyentes y acordaron
dar socorro a los obreros sin trabajo para dos días.
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