Eulalia de Borbón

La infanta Eulalia de Borbón nació en el Palacio Real de Madrid, el 12 de febrero del año 1864, al ser hija menor de la reina Isabel II.

Se casó con su primo Antonio de Orleans, duque de Galliera, hijo del duque de Montpensier y Luisa Fernanda de Borbón, hermana de la reina Isabel, en un matrimonio de compromiso que parecía que calmaría las luchas entre la reina y su cuñado Montpensier, ya que satisfacía a este, que casaba a su hijo con una hija de la reina y también satisfacía a Isabel II, que veía a su hija casada con una de las fortunas más importantes de Europa.

Quien también veía con buenos ojos el enlace era el hermano de la novia, el rey Alfonso XII, y el compromiso de la boda fue hecho en octubre del año 1885, unas semanas antes de la muerte del rey. De hecho parece ser que a quien únicamente no satisfacía el ese matrimonio, que se realizó por razones de estado fue a ella, que incluso se hablaba que ya mantenía una relación con Georges Maurice Jametel, un dependiente de una boutique de París.

El matrimonio entre los primos se celebró el 6 de marzo del año 1886, y según las crónicas la boda fue triste, tanto que se cuenta que los invitados iban vestidos de negro y ni siquiera hubo música, por guardar el luto por la muerte del rey.

Como era de esperar el matrimonio fue un desastre, ya que se había impuesto las razones de estado al deseo de los contrayentes y se cuenta que Eulalia durante este tiempo se hizo más amiga de su suegro, duque de Montpensier, que de su marido, e incluso nuera y suegro realizaron varios viajes por Europa mientras el esposo se quedaba en España.

El matrimonio tuvo dos hijos, Alfonso de Orleans, aviador militar y Luis Fernando de Orleans.

El 31 de mayo de 1900 se produce un hecho que se convierte en un escándalo en la corte madrileña, y es que por primera vez en la historia una infanta de España solicitaba el divorcio de su marido, no como se ha dicho en un montón de medios ahora con motivo de la separación de la infanta Elena. El suceso originó el enfado de todos, incluido el rey Alfonso XIII que obligó a su tía a exiliarse de España.

Pero además no era un divorcio amistoso y en buena lid, sino que se comenzaron a sacar a la luz los trapos sucios de la pareja, ya que en toda la corte eran conocidas las infidelidades de los dos, hasta que dos años más tarde llegaron a un acuerdo.

Eulalia residió en París, y al no tener posibilidades de temer casa propia se quedaba en una residencia para señoras y se dedicó a viajar, algo que le encantaba.

El año 1919 inicia junto a sus hijos un proceso de incapacitación del marido, que había dilapidado la fortuna familiar con sus amantes, sobre todo con Carmen Gimenez Flores, conocida como la Infantona, consiguiendo la incapacitación del duque de Galiera, que quedó bajo la tutela de su hijo mayor Alfonso.

Parece ser que uno de los motivos más importantes que hubo para el distanciamiento entre Eulalia y el resto de la familia real, fue el deseo de escribir que tuvo en esta época, así el año 1911 publicó el libro “A lo largo de la vida”, libro donde la infanta exponía sus opiniones y que fue prohibido en España, al producir un gran escándalo en la corte española.

El año 1915 escribió “La vida en la Corte desde dentro, en 1925 "Cortes y países tras la Guerra”; en 1930 unas "Memorias" y en 1944  "Cartas a Isabel II", que versaba sobre su viaje oficial a Cuba y Estados Unidos realizado el año 1893.

Por último el año 1946 publicó el libro “Para la mujer”, donde reflejaba unas ciertas ideas feministas.

Algunos la llamaron la “infanta republicana o la “infanta feminista”, aunque después de la guerra civil coqueteó con el régimen franquista, de hecho Franco le concedió un coche y chofer de por vida hasta que falleció en Irun el año 1958.

Está sepultada en el Panteón de Infantes del Monasterio de San Lorenzo de El Escorial.