Pósito

El Pósito era un almacén de carácter municipal, donde se guardaba la reserva de grano colectiva. Esta reserva era aportada por el vecindario, procedente de tierras destinadas al efecto, o adquirida con fondos públicos, servía a cubrir algunas de las necesidades de los vecinos.

El Pósito hacía sobre todo préstamos a labradores necesitados, en época de sementera, que estos devolvían en especies tras recoger la cosecha.

Aunque existen algunas noticias más antiguas de la institución del Pósito en Sanlúcar, aparece constituida formalmente el día 6 de diciembre del año 1532 por el duque don Juan Alonso de Guzmán.

El año 1731, el Consejo de Castilla, después de haber mediado un informe favorable, autorizó la construcción de un nuevo Pósito.

En 1736, cinco años más tarde, se termina de construir el nuevo Pósito, que estaba situado en el Barrio Alto, en la Plaza de Arriba, frente a la antigua cárcel, donde aún se encuentra una lápida conmemorativa de su construcción.

A pesar de su terminación en 1736, diecisiete años más tarde, en 1753 ya se llevaron a efecto obras de reparación y renovación de las naves.

Desde su constitución, el Pósito estaba regido por un Depositario o Mayordomo, que era elegido anualmente por el Cabildo, y que tenía la misión de llevar las cuentas, de las que tenía que rendir al cabildo finalizado su año de servicio.